La pasé muy bien la gente muy amable, el lugar limpio, tranquilo, las actividades me gustaron mucho.
Seguro regreso.
Como observación, estaría bien que los meseros subieran a la alberca que está junto al temazcal para ver si el huésped quiere algo de beber o comer, sábado y domingo tuve que pedir que le llamaran a algún mesero, no había mucha gente en el hotel, el lunes no subió nadie a ofrecerme nada, el martes estuve en la alberca junto al restaurante y un servicio mejor, supongo por que está junto a la cocina.
En el restaurante al llegar uno, tardan en llevar la carta u ofrecer algo de beber, les tuve que llamar cada vez que llegué a desayunar o cenar.
Gracias por las demás atenciones.